Saber cómo lavar la viscosa es importante si quieres mantener tus prendas de esta fibra en buen estado durante mucho tiempo.
La viscosa es una de los tejidos preferidos para vestir por su suavidad, que no pierde como le ocurre al algodón. Mis consejos te resultaran útiles tanto si los aplicas a un fular como a otra prenda de tu ropero.
Como te expliqué en nuestro post ¿Qué sabes de la viscosa?, esta fibra se extrae de la naturaleza y tiene sus mismas propiedades de uso en cuanto a comodidad que la seda o el algodón. Por eso nos gusta tanto y nos resulta tan agradable para vestir o para cubrirnos el cuello.
Seguir unos sencillos cuidados permitirá alargar la vida de tus prendas favoritas y mantenerlas en perfecto estado para su uso.
Cómo lavar la viscosa
La viscosa se vuelve frágil cuando está mojada, por eso, lo ideal es que permanezca poco tiempo en remojo. Un lavado rápido a mano es suficiente. Si te resulta imposible esta opción, puedes lavarla en lavadora en un programa corto y para ropa delicada. Previamente pon la ropa del revés.
Para eliminar el agua, no retuerzas la prenda, tan sólo comprímela un poco para retirar el agua sobrante. En el caso de que la laves en la lavadora, selecciona un centrifugado de 600 revoluciones.
Cuando la tiendas para secar, puedes utilizar diferentes formas en función de qué pieza de ropa se trate. Para fulares, bufandas y chales, simplemente ponlas en la cuerda por la mitad, dejándolas totalmente estiradas. Para partes superiores, como blusas o camisas, tiéndelas desde el borde inferior, dejándolas abierabriéndola para que se ventilen mejor. Para piezas inferiores como faldas y pantalones, desde la cintura y también abriéndola. Verás que de esta manera se secan muy rapidamente.
No se deben meter en secadora.
El planchado de la viscosa
Plancha tus prendas de viscosa del revés, para evitar brillos y marcas de las costuras y dobladillos, a una temperatura media.
El guardado y transporte

Evita doblar las prendas de viscosa. La mejor manera de guardar un artículo Look by LyLy es ¡colgarlo de una percha! Así, por efecto de su propio peso, se eliminarán las arrugas y estarán perfectas para la próxima vez que desees usarlas.
Para llevarlas, en tu bolso o en una maleta si sales de viaje, lo mejor es enrollarlas. Llegarán perfectas y a punto para sacarte de cualquier apuro. Ya sea para protegerte del aire acondicionado o de una brisa fresca… o si tienes que asistir a una cena o un acto más formal. Un chal, una bufanda o un pañuelo al cuello, te darán ese toque chic.