Récord de subasta
Hace tiempo me sorprendió una noticia en televisión en la que informaban que un cuadro de Los Girasoles de Van Gogh era el cuadro más caro del mundo. Dicho cuadro se había subastado batiendo el récord de tasación.
Tirando de hemeroteca, he comprobado que fue en el año 1987, lo adquirió un coleccionista japonés y ahora se encuentra en el Sompo Japan Nipponkoa Museum of Art.
Desde entonces, siempre he relacionado a Van Gogh con girasoles y color amarillo; a pesar de que posteriormente he conocido otras obras suyas muy populares y que aparecen en los libros de arte.
Debido a mi facilidad para asociar imágenes y buscar referentes visuales, mi mente relaciona estampados y colores de los tejidos que utilizo para mis bufandas y fulares con estilos artísticos, decorativos o de pintores a los que me recuerdan.
Los girasoles y Van Gogh
Cuando vi esta tela estampada con girasoles y con predominio del color amarillo, no pude más que pensar en Van Gogh. De modo que, para mí, éste que utilizo en el fular es el “estampado Van Gogh”.


Pero, intrigada por si este pensamiento era común, realicé una pequeña encuesta para averiguar qué cuadro del pintor es el primero que viene a la mente cuando se piensa en él.
Éstos son los resultados de las respuestas:
- Girasoles: 40%
- El dormitorio: 16%
- Noche estrellada: 13%
- Autorretrato: 13%
- Lirios: 9%
- Terraza del Café de la Place du Forum: 2%
- Par de zapatos: 2%
- Iglesia de Auvers-sur-Oise: 2%
- El descanso del trabajo: 2%
Ciertamente, y tal como afirman varios autores, Los Girasoles, es la obra que más se relaciona con el artista. Algunas personas encuestadas me han llegado a comentar que, aunque la han nombrado, no es la que más les gusta.
Quizás el motivo de la popularidad de este tema pictórico se encuentre en que no lo realizó en una único cuadro y eso ha favorecido su divulgación. El pintor realizó siete versiones, de las que cinco pueden contemplarse en museos de Ámsterdam, Londres, Múnich, Tokio y Filadelfia.
El amarillo y Van Gogh
Con estas pinturas de Los Girasoles quiso decorar la habitación de invitados de la casa que alquiló en Arlés (Francia), conocida como La Casa Amarilla y que reprodujo en una pintura.
Van Gogh esperaba ilusionado la llegada de otro pintor -Gauguin- y confiaba recibir más visitas. Deseaba convertir su casa en una especie de hogar de pintores.

El color amarillo que predomina en estas pinturas, fue el favorito del pintor neerlandés y uno de los pigmentos básicos en su paleta.
Para él representaba la felicidad, lo que demuestra una sensibilidad extraordinaria para el color; pues el amarillo precisamente se utiliza en publicidad para transmitir y provocar alegría y optimismo.
Lydia Comas
Gracias por la explicación. Yo fui una de las que contestó: Los girasoles.
Muy bonitos tus diseños.
Gracias, Rosa