El post de hoy se lo dedicamos a Robert Taylor; otra de las grandes estrellas americanas del cine que destacó también por su elegante aspecto.
Nació en Nebraska, en 1911. En su juventud destacó en deportes, fue Boy Scout, ganó premios de oratoria y tocaba bien el cello; por lo que pensó en estudiar música en la universidad o medicina, como su padre. Sin embargo, tras actuar en grupos de teatro amateurs, estudiar algo de psicología y participar en sus primeras películas, continuó su carrera como actor.
Amplia carrera de actor
Le apodaron “el hombre del perfil perfecto”, por su gran atractivo. Alto, carismático, con brillantes ojos azules y ondulado pelo negro. Interpretó al amante romántico en los años 30. En los 40 mostró su capacidad dramática con un bigote que causó sensación. Y en los 50 representó irresistibles héroes de aventuras.
En sus inicios, sus críticos se burlaron de él diciendo que era más guapo que sus coprotagonistas femeninas… aunque pronto descubrieron que también tenía talento para actuar. Fue mejorando sus dotes de interpretación a medida que daba vida a diferentes tipos de personajes, ofreciendo siempre una imagen masculina y viril.
Era perfeccionista y hay numerosas anécdotas que reflejan su esfuerzo para mejorar sus habilidades para ser un buen actor. Por ejemplo, era diestro, y pasó semanas perfeccionando su habilidad para disparar con la mano izquierda para su papel de Billy el Niño (1941).
Contrato con la Metro-Goldwyn-Mayer
Desarrolló casi toda su carrera en la Metro-Goldwyn-Mayer, donde tiene el récord de contrato más duradero con un estudio. Un ojeador le descubrió y le ofrecieron su primer contrato en 1934, y en dos años ya interpretaba papeles de protagonista. Participó en más de 80 películas entre 1935 y 1960. Su película favorita fue El puente de Waterloo (1940).
Tuvo una estrecha relación de confianza durante 17 años con Louis B. Mayer, cofundador de MGM, y uno de los hombres más ricos y poderosos de la época. Participó en más de 80 películas entre 1935 y 1960. Entre su filmografía encontramos películas de aventuras, westerns, comedias, bélicas o cine negro… destacamos la superproducción de Quo Vadis? (1950) y su papel en el personaje de Marco Vinicio.
Actuó junto a Greta Garbo, Irene Dunne, Vivien Leigh, Elisabeth Taylor, Ava Gardner… y tuvo amistad, entre otros, con Clark Gable, Gary Cooper, Ernest Hemingway, Robert Stack, John Wayne y Ronald Reagan.
Robert Taylor, gentil y buena persona
Robert Taylor fue una hombre amable y educado y nada pretencioso. Trabajó con la mejor voluntad y obediente a los estudios de cine sin esperar ningún premio. No se le conoce ningún escándalo y prefirió una vida familiar. Se casó primero con la actriz Barbara Stanwyck y tras el divorcio se casó con la también actriz Ursula Thiess con la que vivió hasta fallecer y con la que tuvo dos hijos: Terrance y Tessa.
Vistió siempre de manera impecable y bromeaba con que su mayor objetivo era acumular un guardarropa de trajes hechos a medida. Vestido de duro vaquero, exquisito gentleman inglés, con una toga o con un traje de corte impecable, mantuvo siempre un porte elegante. Consideraba que ser atractivo y gustar a la gente era una ayuda para un actor; pero que no tenía nada que ver con actuar.
Tenía ideas políticas muy conservadoras e incluso testificó en el Comité de Actividades Estadounidenses, contra posibles comunistas en la industria del cine. Pero sobretodo, era un hombre honesto, con valores muy tradicionales; feliz y agradecido por las oportunidades que su trabajo en la MGM y en cine le había dado en la vida.
Robert Taylor alcanza la madurez personal y como actor
El estudio se esforzó por ofrecerle papeles de protagonista a medida que pasaban los años; aunque en ocasiones forzando un poco su aspecto para parecer más joven, como en el papel del valiente caballero de Ivanhoe (1952) con la preciosa Elisabeth Taylor. Esta película fue la primera vez en que un actor americano rodaba una película en Inglaterra.
A finales de los 50, el tabaco empezó a afectar su belleza y cogió peso; pero siguió alternando algunos papeles protagonistas en cine, con la televisión. En 1958 fundó su propia productora, y siguió trabajando para la televisión como en la serie de Los detectives (1959) o el popular western La llamada del Oeste.
Entre sus hobbies, la caza y la pesca, escribir cartas y volar. Volar le atrajo tras rodar una película en el papel de piloto. La MGM le regaló una avioneta. Fue instructor de vuelo en el ejército durante la Segunda Guerra Mundial. Disfrutó siempre de su propia avioneta, llamada “Missy” (el diminutivo cariñoso para su primera mujer). Se aficionó a la caza junto a sus amigos Gary Cooper, Clark Gable o John Wayne. Fumaba mucho, desde muy joven; fue diagnosticado y operado pero murió de cáncer de pulmón a los 57 años, en 1969. Numerosas celebridades y amigos asistieron a su funeral.